lunes, 31 de diciembre de 2018

Mejores Lecturas del 2018


Se nos acaba el año, y al hacer balance de numerosos aspectos, no podía dejar a un lado mis mejores lecturas. He decidido no incluir en el listado aquellos que he releído, que son bastantes, solo los libros que he descubierto por primera vez en este 2018.

Salvo "Llámame por tu nombre", el resto no siguen un orden cronológico ni obedecen a mayor preferencia según aparecen colocados. Estoy orgulloso de haberme asomado a clásicos, y sobre todo de haberme superado en cantidad de ejemplares devorados respecto al año anterior. Y no, no voy a decir cifras porque ni me gusta hacerlo ni pienso alardear (ni compararme con nadie) como si me creyera más culto por ello.

Aprovecho también para pedir disculpas por estar algo "ausente" en el blog desde verano para acá, realmente reseño y estoy más activo en mi cuenta bookstagram, aunque bien es cierto que el trabajo me quita mucho tiempo.



Llamame por tu nombre, de André Aciman.

El mejor libro que he leído en 2018 (y en mucho tiempo).

André Aciman logra recrear ese famoso Locus Amoenus que tanto escuché en clase de literatura y que identifiqué magistralmente recreado en esos bellos paisajes de la Italia estival, escenario cómplice de una historia de amor que te atrapa, donde no hay malos ni buenos, ni culpables ni víctimas, solo juega con ella el azar y el tiempo.

Con una retórica impregnada a su vez de una exorbitante sexualidad y de una tierna sensualidad, que por momentos deja que algunas frases te marquen, te hagan reflexionar e incluso sientas reflejadas como parte de ti, que reconoces en pasajes y palabras.

Un despertar en todos los sentidos, un deseo pasional que pide realizarse venciendo al miedo y al olvido, ya que la experiencia ahí queda, ahí permanece, en un recuerdo al que regresar y del que no arrepentirte.

Ya no es la historia en sí, es la pluma de Aciman en el despertar de Elio. A veces te asustan sus reflexiones, otras en cambio se asoman frases (y bastantes, me gasté casi todos los pos-its de tres colores diferentes) que te conmueven, que no se reduce al morbo sexual que puede provocar a priori, como es la idealización de Oliver, la inseguridad, el juego de la seducción con cal y arena, el miedo y el ansia de exteriorizar esos sentimientos que tanto tiempo en su interior le hacen casi delirar...

Veo tantos mensajes, tantas imágenes, de libros de otras épocas pero con protagonistas no heterosexual es, que ya era hora de verlo plasmado en papel.

Oliver y Elio, ya formáis parte de mi, parte de mis pensamientos, vivos en mis sentimientos. Conoceros fue entregaros a cambio un trozo de mi alma, pero realmente quien ganó más fui yo leyendo vuestras páginas y reavivando esa esperanza donde uno se siente dichoso por creer en el amor, y que este te toque y te eleve en todas sus vertientes, pase lo que pase.





Origen, de Dawn Brown. 

Uno de mis autores preferidos, aunque para muchos sea pésimo . Puedo entender que se critique la estructura de sus novelas, la saga Langdon tiene un patrón muy parecido pero eso no significa que sea mala. De hecho los libros de este autor me enseñan mucho, aprendo datos interesantes de ciencia, arte, tecnología, y es increíble el compilado de información que tiene y la manera en que te lo maneja es muy sencilla. El gran talento es tocar temas muy controversiales y de alguna forma encontrar una visión conciliadora entre las opiniones más extremas que puede haber al respecto.

Y aqui, se aborda el origen de la vida, ¿qué puede haber más controversial que eso? En el inicio del libro nos anuncia que todos los datos que maneja, ya sean tecnológicos y científicos, entre otros, son verídicos.

Esta novela en sí no me parece la mejor de la saga, vi muchas conveniencias y casualidades pero lo que la convierte en valiosa es justo por la conclusión a la que llega: bastante impactante y que te deja en shock. Demasiada información para procesar en un rato. Amé demasiado el clima de la historia, la conclusión del origen de la vida y de hacia donde estamos evolucionando.




Jane Eyre, de Charlote Brontë.

Lo leí a raíz de escuchar que era como Orgullo y Prejuicio oscuro. Y eso fue todo lo que necesité aventurarme con él. No me encanta tanto la tragedia ni que el protagonista sufra, pero creo que la autora hace un gran trabajo dejando muy claro cual es su idea de la vida, qué es equilibro, qué es justicia, como debe ser un hombre bien, como debe ser una mujer bien... es un gran trabajo plasmando su idiosincrasia.

Me encantó ver eso, leer qué virtudes Charlotte consideraba más elevadas, qué vicios eran imperdonables, y como éstos tenías consecuencias en la vida...




Una habitación propia, de Virginia Woolf.

Nunca viene mal aprender de feminismo o iniciarse en él, este libro me abrió los ojos a muchas cosas y me hizo tener mejores argumentos para las ideas que ya traía pero que no estaban bien cimentadas en mi cabeza.

Es un ensayo basado en una conferencia que dio Virginia Woolf en donde hablaba de la mujer en la novela. Obviamente hablar de ella en cualquier cosa no puede remitirse solo a ese espacio ya que la violencia y la discriminación de género afecta a todo y la autora se extiende aspectos de la vida publica y como la mujer ha ido haciéndose un hueco ahi pero todavía le falta mucho espacio para poder expresarse.

Una de las partes con el tiempo espera que las mujeres creen otros estilos, formatos y géneros en la literatura porque hasta ahora han creado desde dentro de un patriarcado y no "libre". Una idea demasiado emocionante.
Y es que la participación de la mujer va a lograr cambios muy profundos.




Emma, de Jane Austen.

La reina indiscutible del romance, no tengo palabras para agradecerle su aporte a la literatura universal.

Emma es una joven muy bella, muy bien educada y con mucho dinero que no se preocupa por conseguir un marido porque ella es feliz y no necesita que la mantengan. Aquí vemos como las mujeres no tenían otra opción para seguir adelante y sobrevivir más que casarse y tener un buen matrimonio. Emma al ser acaudalada no le afecta esto, asi que se pasa la vida pensando demasiado bien de si misma y metiendose en la vida de los demás, sobre todo en la vida amorosa de éstos.

Me identifiqué con ella, particularmente en el hecho de que justamente ella piensa bien de si misma, se equivoca pero no es pretenciosa ni es insoportable, solo que a veces es algo ilusa.
La novela es entretenida, tiene diferentes romances que funcionan de forma similar, ocurren cosas que no te esperas y hay uno en particular que es hermoso. Su final me da toda la vida que necesito para seguir existiendo.




A todos los chicos de los que me enamoré, de Jenny Han.

Este tipo de novelas no es de mis favoritas, si bien es entretenido leerlas y las disfruto; la verdad es que no entran en mi top pero Jenny Han hizo algo muy distinto con el género del romance juvenil. Si bien puede estar llenar de clichés, la autora se compromete con su idea y la lleva hasta el final sin perder su esencia.

Una lectura super fresca y rápida, y que me gustó mucho por la relación familiar que hay en la de Lara Jean: todas las tradiciones, las festividades... Amé cómo ella lleva su vida personal, sus cartas, sus diarios, las cosas importantes que tiene guardadas en su habitación.

Este libro te transporta tanto, es la mejor definición de lo que es la sensación de un hogar, la calidez de una casa. Conforme lees el libro te pones en su piel, tienes esa sensación de estar agusto, de estar arropado de gente que te quiere, vivir con ella esas experiencias que tiene, que son muy de adolescente, pero da igual porque te transporta a esos momentos. Me gustó mucho la ambientación y como están construidos los personajes.

Aplaudo mucho el trabajo que hizo la autora con la protagonista: Lara Jean es un poco introvertida, disfruta de actividades que implicar ser popular e ir continuamente de fiesta, y eso no la hace menos interesante frente a la típica misteriosa, interesante, que todos aman y que el protagonista cae rendido a sus pies. Odio ese estereotipo, no hay una transformación de personalidad. Esta chica consigue como un amor de cuento de hadas pero siendo ella misma: no hay condiciones ni tiene que ser de cierta forma extraña para que alguien te quiera como eres y puedas tener una relación sana y bella.

Dejando a un lado caer rendidos a los encantos de Peter Kavinsky, tendremos un romance tierno, con dramas adolescentes, pero de una forma saludable: sin amores tóxicos ni un tipo abusivo. Para un publico joven siempre viene bien este contenido y como muestra una relación buena, donde has de ser tu mismo siempre. Aprecio mucho lo que hizo Jenny Han, y a mi ya que soy un adulto, me recordó mucho a mi adolescencia de una manera especial.

La película creo que pierde un poco, pero este libro me gustó mucho, y tengo ganas de seguir con los otros dos para ver cómo termina la trilogía, pero ya será el año que viene.




martes, 25 de diciembre de 2018

¡Feliz Navidad!

¡Feliz Navidad!


Hoy es Navidad. 
Quería desear a todos quienes habéis estado conmigo este año
que paséis estos días de celebración inmersos en el amor de vuestras familias.  
Me gustaría que 2019 os traiga toda la alegría, el amor, la serenidad y la luz.  


lunes, 24 de diciembre de 2018

Reseña La alargada sombra del amor de Mathias Malzieu

Información 

Titulo: La alargada Sombra del Amor
Título original: Maintenant qu'il fait tout le temps nuit sur toi.
Autor: Mathias Malzieu
Editorial: Reserveir Narrativa
Género: Romántico.
Cubierta: Rústica con solapas
ISBN:  9788439723059
Páginas: 151


Sinopsis

Mathias, un joven treintañero, acaba de perder a su madre, mientras espera en el parking del hospital a su padre y su hermana, ocurre un hecho insólito: un gigante se le aparece y le anuncia: "Soy el gigante Jack, doctor en sombrología. Trato a las personas que sufren una pérdida administrándoles un trozo de mi sombra. Con la sombra se puede batir el dolor y la muerte". Mathias deberá aprender a utilizar la sombra protectora.¿Será capaz de vencer el dolor? ¿Evitará caer en el abismo? ¿Somos nosotros mismos capaces de asumir la perdidad de un amor, un familiar o un amigo? Si no es el caso, el gigante Jack -un viejo conocido de los lectores- tiene una fórmula perfecta para todos.


Opinión 

Tal y como recoge la sinopsis, Mathias se siente solo y deprimido tras de la muerte de su madre. No es capaz de aceptarla y aún menos de superarla. Mientras espera a su padre y a su hermana en el parking del hospital, saca un pequeño reloj de la bolsa con las pertenencias de su madre. En el reverso se encuentra con un texto: 

Para ayudaros a combatir la muerte: Gigante Jack, barquero de entre mundos, médico de las sombras, especialistas en problemas de vida pese la muerte. Contacto: canturread "Giant Jack is on my back...".

Cuando canturrea la canción, enseguida aparece el Gigante Jack, quien le regala un trozo de su sombra protectora. Desde allí Mathias intentará convivir con su sombra y aceptar la pérdida de su progenitora.


"(...) Guardo el recuerdo de una chica que dormía en mi corazón, se despertaba a cada minuto para accionar los latidos y se dormía de nuevo. Un día no se despertó y mi corazón se secó... Me golpeé el pecho, grité, me lancé contra árboles, y nada".


El libro está narrado en primera persona por Mathias. En la mayoría de los capítulos se dirige a su madre, pero también encontraremos algún fragmento adonde lo hace a los lectores.

Nos cuenta el modo en que vive ciertas situaciones como el entierro de su madre y afrontar que ella no está ya en su día a día, y es que es inevitable sentir lo trágico de ese momento que podría desmoronar la vida de cualquier persona.  Muestra su dolor utilizando un lenguaje muy poético en la mayoría de la historia de ahí que el tono surrealista de la presencia del gigante deje paso por momentos a un tono realista pero narrado de una forma muy emotiva.



"Algunas veces solo necesito esconderme, en otros momentos desaparecer, para que me dejen en paz, y no pensar en nada. Aunque lo mejor sería que me hiciera un traje de pájaro con mi sombra y volar, porque estoy harto de arrastrar la cara bajo tierra, de no ver absolutamente nada, y pienso que, quizá, en el cielo, o justo arriba, te encontraré".


El ritmo de la historia no me terminó de agradar, si bien era rápido también me perdía constantemente ya que no distinguía los cambios de tiempo. Por poner un ejemplo, en las últimas páginas comenta que ya ha pasado un año des de la muerte de su madre, y me quedé bastante confundido ya que creía que solo habían pasado unos dos o tres meses. Tampoco me dejó conforme la incursión del toque fantástico porque hallé bastantes incongruencias, y a decir verdad, el peso de la inesperada parte irreal provoca que mi interés y valoración del libro decaiga hasta tal punto que el cierre no me aportase nada.


Hay poquísimos personajes, destacando obviamente Mathias y el Gigante Jack.

Si he de destacar algo de Mathías, sería su sensibilidad y su debilidad psicológica. En varias ocasiones parece enloquecer por la pérdida de su madre y es que ante la marcha de un ser querido no todos reaccionamos de la misma forma.

Luego tenemos al Gigante Jack, al que pese a ser uno de los personajes principales, no sabría definirlo con exactitud: es bastante complejo pero en el sentido de notarle bipolar, tan pronto lo ves serio y grosero como al momento divertido y amable. Lo que tengo bien claro es que es un ser con buen corazón que ayuda a las personas a combatir el dolor regalando trozos de su sombra.


"Nos hemos despeñado. Igual que unos alpinistas a los que acaban de quitar la pared montañosa, el punto de apoyo al que se aferraban para no perder el pie. Aunque te hayas hecho a la idea que va a suceder lo peor, la caída siempre es un cruel golpetazo".

No es un mal libro sencillamente creo que no está destinado a cualquier persona. Para disfrutarlo has de amar la narración en tono poético (su historia pretende enseñar al lector cómo aceptar y superar la pérdida de un ser querido pero también aborda pinceladas de amor, pero no de uno cualquiera: del amor que siente un hijo por su madre) y saber encontrarle sentido a partes fantasiosas.

En cuanto a la valoración: A pesar de su extensión bastante corta, requiere que al lector le gusten aquellas historias que tienen un tono poético y que expresan demasiadas cosas de modo indirecto. Bien es cierto que dadas las circunstancias de la temática de su trama, el libro puede llegar a pecar de dramático o, al menos, muy pesimista.

"Entierro mi sombra gigante en la fosa de mi corazón, una especie de lavadora con sangre en lugar de agua y piel en lugar de ropa. Tiempo de secado: toda una vida".

"La temperatura de mi corazón ha caído bajo cero. Estás muerta".




Calificación


3/5

viernes, 2 de noviembre de 2018

Reseña Una vida de perros de Estefanía Salyers

Información 

Titulo: Una vida de perros
Título original: A Dog's Life.
Autor: Estefanía Salyers
Editorial: Plaza & Janes Editores
Género: Romantica.
Cubierta: Rústica con solapas
ISBN:  9788401021589
Páginas: 368


Sinopsis


Si el amor de tu vida se casa con otra, no te preocupes, tienes tres remedios para superarlo: tu mejor amiga, la Gran Manzana y un perro faldero.

Hay ciudades a las que hay que ir y ciudades a las que tienes que huir. Ciudades que te ayudan a olvidar, y otras que te ayudan a sanar. Ciudades que te recuerdan quién eres, y otras que te descubren quién quieres ser. Lucía hará un viaje de ida y vuelta hacia ella misma en su próximo destino: Nueva York, la ciudad que nunca duerme. La mañana en que recibe la invitación a la boda de Alberto, el amor de su vida, Lucía desea con todas sus fuerzas despertar de esa pesadilla. Pero la boda es real y, queriendo escapar del dolor y las dudas, Lucía cruza el charco y se traslada a casa de su amiga Olga, en Nueva York. Allí hará más amistades, vivirá excitantes romances, sufrirá otras traiciones y volverá a meter la pata en múltiples ocasiones. Pero sobre todo dejará que lo más inesperado suceda. Porque ¿quién le iba a decir que un perro sería el verdadero comienzo de su nueva vida?.


Opinión 

La reseña que traigo hoy es sobre un libro que me ha sorprendido (y para bien) ya que en su momento pensé que sería algo así como una comedia o bien algo chick lit pero en realidad va más allá de eso, ya que si bien encontramos pequeñas dosis de romance y pinceladas de humor, creo que debería apreciarse por esas gotas de drama y el reflejo de humanidad que encierra entre sus páginas.

Podría comenzar hablando de su protagonista, Lucía, y su "don" para hablar y desahogarse con los perros, las zancadillas que le ha hecho la vida (o las consecuencias de sus errores) o el motivo de la depresión que siente, incluso abordar la amistad que hay entre ella y sus dos amigas del alma, "Las Tres Mellizas del Barrio", pero antes me veo realmente en la necesidad de destacar algo primordial que creo que refleja esta novela: tenemos una protagonista indiscutible, que se encamina a algo más profundo y que a la mayoría nos cuesta tanto: los cambios en nuestra vida.

Quien no arriesga no gana, pero abandonar la zona de confort y lanzarnos a la aventura nos da vértigo, es así de claro. No obstante, esa es la esencia de esta historia y naturalmente encierra una valiosa lección.

"El amor nunca puede ser tan cobarde, porque pasa factura. Yo lo estaba pagando.
Pero esa deuda  ya la había saldado, y con intereses emocionales que a nadie le gustaría pagar. Por eso, entonces, era el momento de ser valiente. Ya tocaba."

"Emprendía algo nuevo. No eran unas vacaciones, entonces lo vi. Era un punto y seguido. O incluso podría llegar a convertirse en un punto y aparte. Me iba y, pasara lo que pasase, no iba a regresar siendo la misma. Definitivamente no iba a volver a lo mismo, a esa vida que en el fondo no me llenaba. 

Ahora os hablaré de Lucía. Ya comenté que no se encuentra en su mejor momento personal, sus decisiones, como las de cualquier mortal, no siempre son las más adecuadas e incluso puede indignarte su perspectiva sobre las cosas. Pero lo que está claro es que no es un cliché de la chica perfecta a la que todo le sale redondo, ella se come tanto la cabeza, le da tantas vueltas a todo que llega a ser demasiado dramática y eso, en el fondo, aparte de robarnos más de una carcajada nos hace empatizar con ella y tomarle cariño.




Desde el inicio de sus páginas queda patente la incertidumbre de su destino al viajar a Nueva York, una vía de escape propiciada por la inoportuna (y dolorosa) noticia e invitación de la boda de su ex. Sin embargo la autora se ha encargado de presentárnosla, sabemos que es impulsiva, y todo un imán para meterse en líos, así que el lector adivina que su estancia allí no va a ir un camino de rosas.


"Intenté fusionarme con los neoyorkinos, fingiendo tener prisa por llegar a alguna parte. Me divertía observar a esa amalgama de ciudadanos... Todas esas personas distintas pero con algo en común. Todos miraban al horizonte, que no al frente. Nadie me miró con atención, tampoco sin ella. Era invisible. Todos los éramos".


"Sentí que yo era la aguja en ese pajar. Porque a ratos pensaba que era la única de fuera. Fuera de lugar. La única que era capaz de quedarse embobada viendo un edificio al que ya nadie prestaba atención. La única capaz de maravillarse con el reflejo del sol en la ventana de un rascacielos o con una señora que regaba su única maceta, colgada de la ventana de un loft industrial. (...)
Tenía la suerte de contar con tiempo para disfrutar y vivir eso y mucho más. Se trataba de encajar en un sitio tan particular que me iba a enseñar a olvidar, a escuchar, aprender...
Es lo que hace Nueva York, te enseña a ir, a redirigir tu camino. Es una guía para entender a vida y a uno mismo en otro tono y a otro rimo, con sus altos y sus bajos. Con sus veranos y sus inviernos".


Nueva York se convierte en un escenario que a su vez hace de cómplice de la evolución de Lucía a través de sus calles y escenario, de sus detalles y secretos, arrastrándonos con ella a lugares tan especiales que se enciende enseguida tu deseo de vivir ahí y conocerlos, ponerte en su piel y compartir a la vez que haces tuya esa experiencia.


Si he de destacar algo que he valorado y agradecido en esta novela es que en ningún momento está del todo claro quien va ser el chico por el que Lucía se decante, eso sí, como cabe esperar, su relación no se explota lo suficiente y para más inri sucederá algo que trastocará todo cuando ya te estás preparando para saber adonde conduce su historia.  Aún así, no hay duda de que la autora ha logrado reflejar muy bien esa tensión maravillosa entre ellos y desde luego, su historia me ha fascinado gratamente.




Y llegados a este punto, no podía faltar el protagonismo de los perros en este libro. Está sensacionalmente reflejado como la protagonista se topa con ellos (es muy divertido y anecdótico cómo hacen aparición en momentos clave de la novela) y cómo se relaciona(y desahoga, con confidencias de lo mas cómicas, todo hay que decirlo) convirtiéndolos en un personaje más en la historia (y no un objeto o complemento de relleno en sus andanzas neoyorkinas).


"Os presento a Lucía. Es terapeuta emocional de perros. Una autentica susurradora o una encantadora de perros".


"No me preguntéis cómo, pero siempre solía saber y anticipar el carácter de los animales. También suelo intuir si tienen o no dueño y de qué forma deja este su impronta en su manera de comportarse. Es un sexto sentido que, sin embargo, no me funciona con los hombres. (...) Y no es porque no preste atención a los detalles. Más bien es que me dan los detalles erróneos, porque yo me fijo en todo. En todo menos en lo evidente".


"Mi teoría confirmaba por qué en ciudades grandes, en urbes como Nueva York, tanta gente tiene perro. Para no sentir el vacío y el peso de la inmensa soledad. Para poder cuidar a alguien. Para querer y sentir una lealtad incondicional, que exigimos tan gratuitamente a veces".


Paseadora de perros (porque simplemente sus dueños no pueden), susurradora de estos cuadrúpedos, todo un chiste pero que a través de sus aventuras con estos canes adquirirá pequeños aprendizajes que se convertirán en vitales en su día a día.


"Fuí consciente -y también partícipe- de esa comunidad compuesta no solo por perros, sino también por sus dueños.

Me gustaba observarlos a todos, todavía no los conocía bien, a algunos no los llegaría a conocer, dado el breve periodo de mi estancia. Con otros, sin embargo, iba a establecer un vínculo muy especial. El que une un perro. Porque a un perro, o un gato, como me había dicho el doctor Muller, no lo eliges tú, te elige él a ti para que formes parte de su mundo.

Esa relación, la que se desarrolla con cualquier mascota, es algo que trasciende más allá de lo que podemos comprender. Si vamos a un refugio o a una protectora, ¿por que decidimos adoptar un animal determinado? Todos tienen una mirada llena de pureza, de inocencia, de una bondad infinita que brilla como si te dijeran que te van a querer siempre.
No les elegimos nosotros, nos eligen ellos. También son los que nos salvan, y no al revés".


Sé que, a priori, para algunos, Lucía sea una treintañera alocada que mete la pata y que no sabe qué hacer con su vida. Sin embargo, creo que el mensaje que se saca de sus páginas es que si no te equivocas, no podrás crecer como persona, y que no hay que culpabilizarse por cometer errores, ya que el problema está en no ser lo suficientemente valiente para afrontarlos.

"Esas mujeres me habían contado algo personal, aunque fuera de la manera más frívola que sabían . Ese era el truco, hacer que las cosas más serias de nuestras vidas parecieran las más ligeras.
(...)
Había llegado el momento de permitir que alguien -alguien que no fuera Olga o Clara- me viera de verdad y me conociera. Tenía que salir de mi zona de confort ".


Por último, antes de dejar la conclusión de la novela, he de mencionar una cita sobre un personaje secundario que Lucía conoce en Nueva York, con la que me he sentido muy identificado a raíz de la descripción que nos da sobre ella: su personalidad y su visión del amor en un mundo que evoluciona y va tan deprisa, que te costará adaptarte a él o que te convertirá única en tu especie. Un personaje valiente que ha surgido en terreno hostil y te insta a aceptar cómo eres y no perder la esperanza manteniendo la esencia de ser tú mismo pese a las dificultades que te tienten a dejar de hacerlo:

"Greta creía en el amor de forma tan ingenua que era incompatible con la generación a la que pertenecía. Como si fuera un pingüino o un caballito de mar, había vivido en la ensoñación del amor para toda la vida. De la monogamia y del eterno enamoramiento. Y había despertado en el salvaje océano del poliamor neoyorkino, sin saber nadar o mantenerse a flote."


En definitiva, "Un vida de perros" tiene en sus páginas todo lo necesario para etiquetarse como una lectura amena, desenfadada y entretenida, pero que solo es la apariencia de una valiosa y acertada complejidad que encierra una historia intimista y adulta.

Una verdad personal que a través de las confesiones y desahogos de la protagonista deja de ser una aparente comedia para ser parte de ti al comprobar que ella cuenta una realidad, que exige toma de decisiones, a veces no tan acertadas, de lo implican las tan necesarias relaciones personales y la perspectiva con que las analizas, con humor o seriedad, una vez hechas con esa ansiada (y a veces retardada o temida) madurez que te ayudará a actuar en consecuencia con las que en un futuro se presentan.


Calificación


5/5

sábado, 22 de septiembre de 2018

Reseña Eleanor & Park de Rainbow Rowell

Información 

Titulo: Eleanor & Park
Título original: Eleanor & Park.
Autor: Rainbow Rowell
Editorial: Alfagurara
Género: Romantico.
Cubierta: Rústica con solapas
ISBN:  9788420415703
Páginas: 432


Sinopsis

Bono conoció a la que sería su mujer en el instituto -dijo Park.
-Sí, y también Jerry Lee Lewis -contestó Eleanor.
-No estoy bromeando.
-Pues deberías. Tenemos 16 años -dijo Eleanor.
-¿Y qué pasa con Romeo y Julieta?
-Superficiales, confundidos y, posteriormente, muertos.
-Te quiero, y no estoy bromeando -le dijo Park.
-Pues deberías".

ELEANOR es nueva en el instituto; su vida familiar es un desastre; con su intenso pelo rojo, su extraña y poco conjuntada forma de vestir no podría llamar más la atención aunque lo intentase. PARK es un chico mitad coreano; su vida familiar es tranquila; no es exactamente popular, pero con sus camisetas negras, sus cascos y sus libros ha conseguido ser invisible.Todo empieza cuando Park accede a que Eleanor se siente a su lado en el autobús del instituto el primer día de clase. Al principio ni siquiera se hablan, pero poco a poco comparten sus hobbies y empiezan una relación de amistad... para terminar enamorándose de la forma en que te enamoras la primera vez, cuando eres joven, y sientes que no tienes nada y todo que perder.


Opinión 

Solo había leído Carry on (o Moriré besando a Simon Snow, que es como lo han querido llamar en español) de esta autora hasta el momento. La historia de Simon y Bazz me encantó tanto en su día que no descarté en el futuro ponerme con otros libros de Rainbow Rowell. Afortundamente hace un mes conseguí un ejemplar de Eleanor & Park y su turno ha llegado (y ya adelanto que no será el último de ella que devoraré).



En esta novela nos encontramos con una historia de amor entre dos outsiders lo bastante inteligentes que aunque saben que el primer amor nunca es para siempre, son lo suficientemente valientes y desesperados como para intentarlo.

El encanto de la historia se basa en su sencillez y en su cercanía, los personajes son tan realistas y profundos que podríamos vernos reflejados cualquiera de nosotros en ellos. Hay que conocerlos, y vivir esos sentimientos en primera persona para quedar eclipsado por el libro.

Leerlo es como regresar a la adolescencia, experimentar los miedos e inseguridades que tenías entonces, y claro esta, a enamorarte por primera vez, junto a lo que con eso conlleva (la primera caricia, el primer beso, el descubrimiento de tu propio cuerpo y el de esa otra persona especial para ti).

Una etapa de nuestra vida en la que teníamos esa sensación de poder echar a volar aunque el mundo se quebrara bajo nuestros pies, planeábamos sobre nuestros problemas y nos creíamos a salvo de lo que ocurriera a nuestro alrededor ya que lo que sentías es tan inmenso que nada ni nadie podría ser capaz de estropearlo.

Eleanor & Park es así, abarca una relación amorosa que te atrapa y te deja huella, pero que al meterse en ti no solo te hace sonreír como un tonto sino que también araña, te desgarra poco a poco. Una historia preciosa pero también triste, temes que llegue el final porque sabes que lo bueno se acaba y nunca estás lo suficientemente preparado para aguantar que tu corazón se rompa en mil pedazos.


"Desintegrada. 
Como si el teletrasporte a la nave Enterprise hubiera fallado. 
Por si alguien se pregunta lo que se siente, no es como fundirse... sino mucho más violento. 
Y aun disuelta en un millón de fragmentos, Eleanor notaba el contacto de Park. Sentía el pulgar de él explorándole la palma. Se quedó inmóvil porque no podía hacer el menor movimiento. Intentó recordar qué animales paralizan a sus presas antes de devorarlas. 
Puede que Park la hubiera paralizado con su magia ninja, con su toque vulcano, y estuviera a punto de engullirla.
Sería alucinante. ".

Comencemos a hablar de sus protagonistas.

Por un lado tenemos a Eleanor, una chica que vive una situación bastante compleja y triste. Su padrastro la echó de casa un año atrás, y en ese tiempo vivió con unos amigos de su madre hasta que decide volver a casa. Tiene cuatro hermanos, con los que duerme en la misma habitación ya que su casa es pequeña (el baño ni siquiera tiene puerta y apenas tienen para comer cada día).

Pese a ello, ella está inmensamente feliz de volver a tener a su familia a su lado, de sentirlos cerca, y su mayor temor es meter la pata y que su padrastro le vuelva a pedir que se vaya. Y no es que este hombre sea un señor precisamente, maltrata a su madre y trata con desprecio a todos.

En una situación así uno estalla o aguanta, y ella decide afrontarlo porque ya no se siente sola, ahora está Park, su salvavidas y su refugio.

Como cabe esperar, las partes de Eleanor han sido muy duras, frustrantes y desgarradoras. Ella es el personaje más complejo que ha de tomar decisiones difíciles, habiendo algunas que comprenderemos y otras no tanto. Insegura y esquiva, siempre tiene una respuesta ingeniosa reservada para Park.


Por otro, está Park.  Este chico es adorable en todas sus facetas, hasta tal punto que creo que nada de lo que pueda hablar sobre él le hará justicia. Con él van de la mano palabras bonitas, los sentimientos inquebrantables y profundos.

Naturalmente él lleva la relación, la cuida y la endulza con el inmenso amor que siente hacia Eleanor y lo que esta le hace sentir. No puede imaginarse un mundo sin ella desde el momento en que la conoce de verdad (ya que al principio ni siquiera se gustan, él ignora todo lo que tenga que ver con ese foco de problemas que es Eleanor para él hasta que las burlas de sus compañeros y la desesperación de la chica le empujan a pedirle que se siente a a su lado).

Ella es esa persona que con una caricia pone su mundo patas arriba, su sueño hecho realidad, con sus defectos y virtudes; y lo tiene tan claro que hará cualquier cosa para evitar que se trunque.


"Eleanor tenía razón. No era guapa exactamente. Emanaba algo artístico y el arte no busca ser bonito; busca despertar tus sentimientos. 
A Park, la presencia de Eleanor en el sofá le hacía sentir que se había abierto una ventana en mitad de la sala. Como si todo el aire de la habitación hubiera sido reemplazado de repente por otro más fresco y puro. 
Junto a Eleanor, tenía la sensación de que sucedían cosas. Incluso allí, sentados en el sofá.".



Su relación fluye con tal naturalidad que es tan real como la vida misma. Dos chicos imperfectos, con sus problemas personales, que se quieren y albergan en su interior un cúmulo de emociones: ríen y lloran, pero también sienten miedo e impotencia, sentimientos que todos conocemos a la perfección. Ambos llevaran la relación como mejor saben, y cometerán errores en el camino, tomando decisiones para las cuales a su edad no están lo suficientemente preparados.


"-¿En serio? –dijo Eleanor-. Qué cutre. 
-Ya lo sé –reconoció él, volviéndose a mirarla-. La próxima vez, me limitaré a decir: Eleanor, sígueme a este callejón oscuro, que quiero besarte. 
Ella no puso los ojos en blanco. Inspiró profundamente y cerró la boca. Park estaba aprendiendo a pillarla desprevenida. 
Eleanor hundió aún más las manos en los bolsillos, así que Park la cogió por los codos. 
-La próxima vez –prosiguió- me limitaré a decir: Eleanor, escóndete tras esos arbustos conmigo, porque me voy a volver loco si no te beso.
Como no se movió, Park juzgó que podía acariciarle la cara. Su piel era tan suave como había imaginado, blanca y lisa como porcelana pecosa. 
-Me limitaré a decir: Eleanor, sígueme a la madriguera del conejo...".


A esta novela no le quitaría nada, ni una sola coma. Es tan perfecta en su totalidad, con lo bueno y lo malo, que se ha convertido en una de mis favoritas de este género. Los diálogos ingeniosos entre los protagonistas son maravillosos, sus personalidades no podrían estar mejor perfiladas ni su relación ser más intensa y sobrecogedora. Me ha fascinado que esté ambientada en los ochenta y encontrar muchas alusiones a películas, series, cómics y música de la época. La narración es uno de los puntos fuertes de la novela, en tercera persona desde el punto de vista de ambos personajes. Tan cercana que parece primera. Dulce, simple y pero a la vez hermosa.

En cuanto al final, a pesar de que mis miedos y reservas, me ha parecido ideal para la novela: precioso y a la vez desgarrador. Podría haber terminado de otra manera y estoy de acuerdo en que los personajes merecían un final más extenso, pero igualmente creo que no puede ser mejor. Es una novela real, y el desenlace no puede serlo más.


"Una cree que si abraza a alguien con todas sus fuerzas, lo tendrá más cerca. Una cree que se puede abrazar a alguien con tanta fuerza como para seguir sintiendo su presencia, grabada en ti, cuando te separas. 
Cada vez que Eleanor se separaba de Park, tenía la misma sensación de pérdida irreparable.".




Eleanor & Park es uno de esos libros que marcan un antes y un después, la historia de dos jóvenes que lograrán hacerse un hueco en tu corazón, que te tocará el alma y te robará largos suspiros. Su historia te impactará y maravillará a partes iguales. Es dulce y amarga, hermosa y cruel, amable y desgarradora. Es simplemente maravillosa. Puede gustar más o menos, pero dudo mucho que deje indiferente a nadie.



Calificación


5/5

viernes, 3 de agosto de 2018

Reseña El chico que nunca llamó de Rosie Walsh

Información 

Titulo: El chico que nunca llamó
Título original: The man who didn´t call.
Autor: Rosie Walsh
Editorial: Plaza&Janés
Género: Romantico, Suspense.
Cubierta: Tapa Blanda
ISBN:  9788401021602
Páginas: 375


Sinopsis

Toda gran historia de amor esconde un secreto...

Sarah conoce a Eddie, se enamora perdidamente y pasan juntos seis días maravillosos. Ella está convencida de que esta vez es de verdad, nunca ha estado tan segura de algo. Así que cuando él dice que debe marcharse unos días y promete llamarla desde el aeropuerto, Sarah no duda de que lo hará.

Pero Eddie no llama ese día. No el siguiente. Ni el otro.

Los amigos le aconsejan que le olvide como él la ha olvidado a ella y que siga adelante. Sin embargo, está convencida de que ha tenido que pasarle algo que explique su desaparición.

Y cuando decide buscarle, abre sin saberlo una puerta cerrada desde hace mucho tiempo.


Opinión 


"Nunca había mantenido una conversación así con nadie, ni siquiera conmigo misma."
Sarah

"No me importan las aficiones que tengas. No importa cuanto trabajes. Podría pasarme el día entero hablando contigo. Es lo único que sé".
Eddie

"No quería separarme de él. El universo que conocía se había detenido, por el momento, y yo no albergaba el menor deseo de ponerlo en marcha otra vez".
Sarah

Confieso que no soy un asiduo lector de novela romántica, es más, siempre que me aventuro a una tengo que tener el respaldo de haber leído previamente una reseña positiva o que la sinopsis se presente de una manera sugerente y atractiva. Y en efecto, con este libro me ocurrió lo segundo, dado que llegó a mis manos antes de su puesta en venta.

Sin embargo, para llegar a leer la sinopsis debía poseer algún elemento que me atrajera. Sin menospreciar la portada, (que es muy bonita y que una vez leído el libro plasma la incertidumbre de Sarah) fue el titulo lo que me condujo a saber más.

Un hecho que a todos nos ha pasado: conocer a alguien, creer que conectas y por una serie de circunstancias, aquello se convierte en una burbuja que acaba explotando llevándose consigo tus ilusiones y esperanzas puestas en la otra persona. Ese alguien desaparece, cobardemente y sin dar una explicación, amparándose en el silencio, dejándote a ti todo el amargo trabajo de hallar y asumir una explicación que darte, y seguir adelante.

Comencé la lectura tomando como punto de partida un dato revelador que la sinopsis recoge: Sarah conoce a Eddie y "conectan", todo es risas, felicidad y dicha hasta que se despiden prometiéndose seguir en contacto pero a él parece tragárselo la tierra. Y lo sorprendente es que descubrí que ese misterio se explota al máximo hasta el punto que te replanteas si realmente Eddie es el típico casanova que te promete la luna y tras ese affair, esa pasión de unos días, te da la patada y reniega de ti para que tú sola te obligues a olvidarlo; y Sarah una ilusa que ha creído en promesas y planes juntos demasiado idealizados para llevarse a cabo por una velocidad de enamoramiento demasiado vertiginosa. ¿Por qué digo esto? Porque conforme lees la novela van surgiendo varias alternativas más serias: ¿acaso lo han secuestrado? ¿y si lo han matado?


"No creo que el amor tenga que ser como una explosión. No tiene que ser trágico, ni desenfrenado, ni ninguna de esas palabras con que lo describen escritores y músicos. Pero sí creo que cuando lo encuentras, lo sabes"


Afortunadamente la historia de Sarah y Eddie involucra a unos secundarios que Walsh se encarga de presentar y de entre ellos escoge algunos para profundizar, asomándose con sus propias subtramas.  Tenemos el círculo de Sarah: su alocada amiga Jo y su peque Rudi; Tommy, su amigo de la infancia, su socia en la empresa que trabaja, Jenni y su esposo Javier, e incluso su ex marido y Kaia, su novia. No obstante, también tenemos al círculo de Eddie, entre los que destaco a su amigo de la infancia, Alan y su mujer Gia.

Por consiguiente, no es el amor de los protagonistas lo que domina en sus páginas, está en ensalzamiento de la amistad y la lealtad, y el perdón (en todos los sentidos de la palabra), entre otros.


"Entonces se lo conté todo. Incluido (...) donde, en el mismo instante en que me había encontrado (...) también ante el hecho incuestionable de que había perdido la cabeza. Jenni soltaba expresiones de ternura, de desencanto y suspiros, y cuando le mostré el último mensaje que le había escrito a Eddie se le humedecieron los ojos. En ningún momento se burló de mi. Ni siquiera arqueó una ceja. Solo asentía en señal de solidaridad, como si mis actos le parecieran del todo comprensibles.

"-No podías dejar que la oportunidad de encontrar el amor se te escurriera de las manos. Hiciste bien en remover cielo y tierra. Porque sí que te enamoraste de él, ¿verdad?
-Aunque una no debería poder enamorarse después de solo...
-Oh, venga ya. Claro que puedes enamorarte después de una semana..."


Admito que me cuesta mucho reseñar este libro burlando la posibilidad de soltar un spoiler, por mínimo que fuera. Podría tratar tantos aspectos que me darían para una entrada bastante amplia, pero desvelarlos le quitaría su gracia a la historia y es necesario que los descubras sin ayuda adicional.



Tras esta presentación general, vayamos despacio y entremos en detalles que sí pueden saberse. Empecemos por la estructura: tres partes, las dos primeras narradas por Sarah y una tercera por Eddie, lo que nos permite conocer el punto de vista de nuestra pareja protagonista así como interiorizar sus personalidades. En estas tres partes hay interrupciones como mensajes que Eddie no acaba de terminar de mandar porque los elimina y cartas dirigidas a otros personajes cuya identidad no está clara (que la edición de este libro ha cuidado su diseño para diferenciar respecto a la narración de la historia). Además, al final de las dos primeras se produce un suceso que además de no verlo venir te empuja a continuar a la espera de que la autora te desvele más datos o te de una explicación al respecto.



Así en el primera parte, Sarah está desolada porque no recibe ninguna llamada de Eddie, es más, ni se conecta a sus redes sociales e ignora sus mensajes (ni siquiera los abre).
No sigue un orden cronológico propiamente dicho, pues su encuentro con aquel hombre ya ha ocurrido. En varios capítulos intercalados, a modo de flashback, ella nos revela como lo conoció, qué ocurrió entre ellos y cómo se despidieron, etc.,. Si no recuerdo mal pasan juntos una semana, pero dichos días tampoco siguen un orden lineal, pues Sarah los evoca desordenados (día 1, día 4, y así sucesivamente), centrándose en momentos que plasma a modo de recuerdos conforme pasan semanas sin tener noticias de su amado y los evoca según su estado de ánimo o al respecto de algo que de pronto la empuja a rememorarlos.

Podría decirse que la autora ha sabido insertar con cuenta gotas aquellos datos de su tiempo juntos para enseñárnoslo cuando considera oportuno, jugando con nuestra paciencia y empujarnos a idealizar esos momentos de Sarah y Eddie, porque seamos francos, es una bella y especial historia de amor de siete días que más de uno quisiéramos experimentar en la realidad. Y solo por ello necesitamos que Sarah nos hable más de Eddie y lo que compartieron.

Aquí vemos más a una Sarah que se replantea si está actuando como una adolescente primeriza en el amor, una acosadora por estar vigilando el móvil a todas horas, buscando explicaciones que la llevan incluso a considerarse culpable por algo. Su nivel de dependencia de las redes sociales de Eddie es casi alarmante, puede parecer una obsesión pero es que hay que entenderla, todo era tan idílico que no recibir una negativa de la otra persona sino el silencio y que encima no de señales de vida, pues preocupa también ya que puedes incluso pensar que algo malo le haya ocurrido (le hayan secuestrado, matado, etc,.)

"Tu silencio obstinado me parece una cobardía y una falta de respeto, y espero que te lo pienses dos veces antes de hacerle lo mismo a otra mujer. Pero asumo que esa ha sido tu decisión, y también que sin duda tendrás tus motivos.

Por último, quería darte las gracias. Los días que pasamos juntos fueron algunos de los más brillantes de mi vida. Los recordare durante mucho tiempo.

Cuidate, Eddie, y adiós.

Sarah"



En la segunda parte conocemos más a Sarah, pues a raíz de una hipótesis que proporcionó la primera, y tal vez para desahogarse con la persona que ama, decide sincerarse con Eddie mandándole cartas (no recuerdo exactamente si correos electrónicos o en su muro de facebook) contándole su vida. Una técnica muy acertada para servir a la intencionalidad del flashback. Asi ya de paso averiguamos cómo conoció al resto de personajes de su círculo, el momento en que entraron en escena, el significado o relevancia que tuvieron a partir de entonces y evidentemente entre tanta depresión y drama, ella al igual que el lector se sorprende al enterarse de los últimos sucesos.


"Sé quien eres.
Durante años soñé con conocerte. Los sueños se desarrollaban en los confines más oscuros de mi mente, y en ellos no tenías ni voz ni rostro, en realidad. Pero siempre estabas allí, y siempre era terrible."


Y con ello llegamos a la tercera parte, que a diferencia de la anteriores está narrada por Eddie en su noventa por ciento. Recoge el relevo al giro inesperado con el que finaliza la segunda y no hace falta adivinar que es este protagonista masculino quien empieza a desvelar lo que andamos esperando ansiosos. No obstante, también recaerá en él una incertidumbre similar a la de Sarah, (¿tal vez justicia poética? El destino puede ser realmente caprichoso).

Esta última división de la novela puede parecer que es una limpieza de imagen de Eddie o que la autora nos la ofrece para apaciguar nuestro resentimiento (o indignación) hacia él por estar ausente o no tener lo que hay que tener para dar la cara.  Y digo "puede parecer" porque realmente descubrimos secretos del protagonista, conectamos con él más íntimamente hasta el punto de enternecernos, ablandarnos y hacernos bajar la guardia porque él tiene una versión, que nos guste o no, hemos de respetar y ponernos en su piel. Algo, que desde luego, no nos gustaría a ninguno.


"-No tengo idea de cómo se deja de querer a alguien. Supongo que basta con sentarse y esperar a que... No sé. ¿A que la llama se apague? (...)
-Tal vez por eso tantos poetas han escrito sobre el desamor. Los ayuda a soltar vapor. Es como una sangría. Una descarga rápida de sentimientos abrumadores"



 

Te hallas ante una novela que parte con un planteamiento sencillo que se vuelve más complejo conforme avanza, por lo que no es de extrañar que te acabe atrapando y necesites cada vez más piezas para asegurarte de que sabes la forma final del puzzle. No obstante, como ocurre en novelas románticas, el desenlace es algo previsible; pero que esto no os desanime a leerla, nada es lo que parece y necesitas devorar muchas pero que muchas páginas para poder entender todo. La táctica de Walsh consiste en no ocultar nada al lector, sino tergiversar la verdad para ofrecer un abanico de posibilidades e ir poco a poco desechando una a una para quedarte con la definitiva y válida.

Y unida a ella, la empatía que puedes sentir hacia Sarah (o con Eddie) al adentrarte más en su historia, porque todos hemos estado en su piel alguna vez o hemos vivido alguna experiencia similar, y es inevitable no poder quedarse de brazos cruzados si vemos algo que nos parece injusto, deseando que el sufrimiento de una buena persona que lo comparte con nosotros se vea aliviado o solucionado.

Algo que no quiero dejar que se me pase resaltar en esta reseña es el contraste que la autora realiza en la vida de Sarah antes de la irrupción de Eddie. El contraste de las dos ciudades que se mencionan: Inglaterra y Los Ángeles, su agobiante conformismo que se rompió al dar el paso en su momento y la recompensa con la llegada de nuestro protagonista, entre otros.

Como punto final, me ha enamorado su pluma, hay muchos pasajes realmente emotivos y bellos, cómplices en sentimientos y confesiones, que te hacen creer en el amor aunque la realidad nunca sea propensa a que funcione en esas situaciones. Nunca hay dar nada por hecho, ni rendirse, pero tampoco obsesionarse con que todo salga como deseas; es complicado lograr ese equilibrio para que el destino o el tiempo, como queráis llamarlo, se encargue de preparar todo e invitarte a que des el siguiente paso, ya sea más adentro o encaminarte hacia otra dirección.




En resumen, El chico que nunca llamó es una novela romántica, emotiva pero nada edulcorada, que se vuelve adictiva conforme avanza el misterio y se alimenta el suspense; así como entretenida y fresca por su narración ágil y dinámica con situaciones del día a día perfectamente esbozadas y reflejadas.

"Nunca se es demasiado mayor por suspirar por alguien. (...)

Si la humanidad no llevara miles de años escribiendo sobre el dolor el amor, por no mencionar el cuestionamiento de la fe y la pérdida del propio ser que trae consigo, yo estaría en paro".

La Señora Rushby, profesora de literatura de Sarah en el instituto.



Calificación


5/5